El Servicio Meteorológico Nacional define al viento como aire en movimiento con dirección, sentido e intensidad. De acuerdo a su velocidad podemos clasificarlos en:
Vientos fuertes
Cuando la velocidad del viento es entre 39 y 49 km/h. Se mueven las ramas grandes de los árboles, se oye el silbido y por ejemplo, los paraguas se utilizan con dificultad por su efecto.
Vientos muy fuertes
Tienen entre 50 y 61 km/h. Las copas de los árboles se mueven totalmente y se siente dificultad en la marcha personal contra el viento.
Temporal
Se rompen las ramas más pequeñas de los árboles y por alcanzar entre 62 y 74 km/h dificultan la marcha personal.
Temporal fuerte
Generan pequeños daños en las estructuras edilicias, como por ejemplo cuando en zonas urbanas se caen las tejas de los techos) y alcanzan una velocidad de entre 75 y 88 km/h.
Temporal muy fuerte
Suelen ocurrir con mayor frecuencia en zonas poco urbanizadas con vientos de entre 89 y 100 km/h en donde se observan caídas de árboles y daños estructurales considerables.
Un ejemplo fue la tormenta de fuertes vientos que afectó el sábado 29 de julio a las ciudades chubutenses de Comodoro Rivadavia y Rada Tilly.
Los vientos fueron tan intensos que hubo suspensión de algunos servicios públicos y graves destrozos en la infraestructura. Según la información oficial, la ráfaga máxima alcanzó los 157 kilómetros por hora. A causa de los vientos hubo cortes de la Ruta Nacional N° 3 por nubes de polvo. En las ciudades, se produjeron voladura de techos, daños a vehículos y en edificaciones.
Para el 14 de septiembre/23 el Servicio Metereológico Nacional había producido otra alerta para la zona cordillerana. Ver aquí: https://x.com/SMN_Alertas/status/1702264524659703957?s=20
¿Cómo afecta este tipo de siniestros a las coberturas de seguros?
Para responder este interrogante, consultamos a la Productora Asesora de Seguros Aluminé Colombo, de Neuquén, quien nos informó sobre las coberturas involucradas en este tipo de siniestros.
Análisis de las Coberturas de Seguro ante Vientos Fuertes en la Patagonia
POR ALUMINÉ COLOMBO.
ESPECIAL PARA EL SEGURO EN ACCION.
Tomando como referencia las tormentas de vientos fuertes que se han desarrollado en la Patagonia Argentina (y que también ocurren en otras zonas), donde ráfagas de viento superiores a 150 km/hora causaron estragos y volcaron camiones, el enfoque en las coberturas de seguros toma una relevancia fundamental.
Las situaciones de vientos fuertes como estas pueden generar daños sustanciales en propiedades y vehículos, dejando a los afectados en busca de soluciones financieras. Desde el punto de vista del seguro, existen diversas coberturas que entran en juego para abordar los estragos ocasionados por fenómenos climáticos extremos.
Explorando las Diversas Coberturas de Seguro ante Vientos Fuertes
El variado abanico de opciones dentro del mercado asegurador ofrece un conjunto de coberturas para hacer frente a los estragos ocasionados por vientos fuertes, algunas diseñadas específicamente, y algunas otras que son más amplias, pero que incluyen coberturas para este tipo de evento, permitiendo a los asegurados afrontar los desafíos financieros que surgen en estas situaciones.
Algunas de las opciones más habituales que el mercado ofrece en relación a los vientos fuertes son las siguientes:
Cobertura adicional HVCT para Edificios y Contenidos en Pólizas de Hogar, Integrales de Comercio e Incendio: El adicional de cobertura de Huracán, Vendaval, Ciclón y Tornado (HVCT) en pólizas de hogar, integrales de comercio e incendio, provee una salvaguardia vital en casos de vientos intensos. Esta cobertura ampara tanto los daños a la estructura como los contenidos, ofreciendo una protección integral contra los estragos causados por estas fuerzas naturales.
Cobertura de Cristales: Los fuertes vientos a menudo generan roturas de cristales, y, aunque este tipo de daños pueden ser cubiertos específicamente, es común que se incluyan dentro de las pólizas de hogar o integrales de comercio. Esta cobertura consiste en el reemplazo de los cristales dañados por cualquier causa, aliviando así la carga financiera causada por estos incidentes.
Seguros de Automóviles: Los fuertes vientos pueden causar daños que están cubiertos en los seguros automotores. Sin embargo, es crucial entender que esta protección está condicionada por el alcance de la cobertura seleccionada en daños: sólo daño total o incluyendo daño parcial (todo riesgo) . Adicionalmente, la cobertura de responsabilidad civil de automotores resulta esencial, ya que nos protege ante daños a terceros en accidentes provocados por vientos extremos, ya sea causados por el propio vehículo, como por la carga transportada.
Responsabilidad Civil para Viviendas y Riesgos Comerciales: Las coberturas de responsabilidad civil por hechos privados o comprensivas para viviendas particulares y riesgos comerciales e industriales, respectivamente, son esenciales en situaciones de vientos fuertes. Estas coberturas liberan de responsabilidad en caso de daños causados por caídas de árboles, carteles derribados y voladuras de techos. Actúan como un escudo protector frente a posibles demandas por estos hechos.
En última instancia, se debe tener en cuenta que cada compañía aseguradora puede tener exclusiones específicas dentro de sus coberturas, por lo que es fundamental contar con el asesoramiento de un profesional en seguros, el Productor-Asesor de Seguros, para seleccionar las opciones más adecuadas a las necesidades individuales. Ante los fenómenos climáticos extremos, la elección correcta de coberturas puede brindar tranquilidad y seguridad financiera.
