Por Dr. Guillermo Héctor Bolado, Abogado, Ex Vicesuperintendente de Seguros de la Nación.
Con la premisa de reducir los accidentes de tránsito, se están tomando medidas como la instalación de nuevas cámaras de fotomultas, que captan incluso el uso del celular dentro de los rodados, so pretexto de concientizar a los conductores del riesgo que conlleva a la seguridad vial el uso de pantallas durante el manejo.
Contradictoriamente, estas nuevas políticas soslayan que en la vía publica existen centenares de carteles de publicidad que también distraen a los automovilistas, pues los mismos contienen imágenes, frases o palabras, con el único objetivo de captar la atención de quienes van en los rodados, incluso conduciéndolos, obviamente.
Son más peligrosas aún, las gigantescas pantallas LED de publicidad instaladas en puntos estratégicos de la vía pública y de gran circulación vehicular, incluso enclavadas en rutas nacionales (Por ejemplo: en Panamericana y General Paz, el lugar más transitado del país), proyectando continuamente videos con frases y luces que distraen a los conductores.
La desatención en la conducción influenciada y provocada por el mal uso del teléfono celular, la publicidad en carteles y pantallas gigantes, son causantes de infinidad de siniestros viales. El uso del teléfono celular durante la conducción vehicular (en particular por recepción y envío de mensajes escritos) impactan en el aumento de los accidentes de tránsito, generando muertes, lesiones y daños materiales.
La mayor siniestralidad vial acelera el vaciamiento de los fondos de primas, impactando luego en el aumento de los precios de las pólizas. Las propias aseguradoras deberían abstenerse en publicitar en carteles o pantallas ubicadas en ciudades y rutas por la incidencia en los siniestros.
Es deseable que, paralelamente con la instalación de las cámaras, se remuevan también todos los carteles y pantallas en la vía pública. El fin es la seguridad vial y no recaudatorio.
