Especial para El Seguro en acción
Lamentablemente, antes de cumplirse un año del fatídico vendaval del 4 de abril del 2012, la naturaleza volvió a sorprender ingratamente a la sociedad y a la industria del seguro, como pocas veces se ha visto: DOS TEMPORALES con precipitaciones récord en menos de 24 horas. El primero azotó a la Capital nacional y el segundo a la capital bonaerense y, como si eso fuera poco, todo ocurrió mientras una ola de turistas regresaba de un fin de semana extraordinariamente largo. ¡Demasiados golpes para ser absorbidos de una sola vez!
Por ahora, y seguramente por varias semanas más, será imposible conocer la cuantía final de los daños materiales sufridos, pero no caben dudas de que alcanzarán cifras descomunales. Y ni hablar de lo más importante: las pérdidas de vidas, que tal vez puedan caratularse como catastróficas y dejarán imborrables huellas de este inusual hecho natural.
Tal como comentáramos en estas mismas páginas en oportunidad del vendaval del año pasado, la acción de los productores asesores en las primeras horas posteriores a los hechos, fue protagónica: proveyó de contención psicológica a los clientes y a la vez los orientó para encarar las acciones preliminares, destinadas a aminorar los daños, como así también a preservar el derecho a ser resarcidos por la póliza (en caso de tener cobertura).
Por el lado de las aseguradoras, éstas ya están comenzando a sentir una lógica congestión en el sector siniestros, efecto que se irá acrecentando en los próximos días. Colaborando y trabajando en equipo, PAS, aseguradoras, liquidadores, inspectores, etc., no me caben dudas de que paulatinamente iremos dando soluciones a muchísimos damnificados.
Aún sabiendo que son minoría las compañías que incluyen la Cláusula de Inundación en las habitualmente llamadas coberturas de “Terceros Completo”, en esta ocasión intuyo que la mayor cantidad de pólizas siniestradas provendrán de la sección Automotores, ya que los planes de “Todo Riesgo” han proliferado incesantemente en los últimos años y, por ende, a pesar de correr por cuenta del asegurado la franquicia deducible, los daños ocasionados en los vehículos, pasarán a engrosar la siniestralidad del ramo.
Respecto a las secciones Combinado Familiar e Integral de Comercio, también es penoso decir que son muy pocas las compañías que ofrecían la cobertura adicional de inundación en dichos planes y por lo tanto, salvo los equipos electrónicos y eventualmente algunos cristales rotos, casi la totalidad de los bienes dañados carecerán de amparo.
Los comercios e industrias de cierta magnitud, con póliza de Todo Riesgo Operativo, muy probablemente cuenten con el sublímite destinado a cubrir inundación, adicional que -con toda seguridad-, sus titulares agradecerán tenerlo incluido.
En menor volumen, quizás recibamos denuncias de Accidentes Personales y, tristemente, también del ramo Vida, como así también de otras coberturas menos frecuentes.
Como ya destacamos en relación al evento del año pasado, en lo inmediato es imprescindible responder con eficiencia y cierta flexibilidad, de modo de dejar a salvo la imagen de la institución aseguradora toda, mostrando además la insoslayable función social que cumple el seguro.
Luego de culminar con esta gran ola de siniestros, las aseguradoras deberán adecuar las coberturas a las nuevas realidades climáticas y sociales, como forma de seguir dando cada vez mejores respuestas a los asegurados y PAS y, fundamentalmente, de crear nuevas fuentes de primas para el mercado. Esto ya lo hemos visto con muchas cláusulas adicionales que se fueron imponiendo por una cuestión de demanda, como por ejemplo: Servicio de Asistencia Mecánica y Remolque, Cobertura de Cristales y Cerraduras, cobertura de Granizo, etc.
Por último, quiero destacar un aspecto positivo de estas lamentables catástrofes: el afloramiento del espíritu solidario del ser humano. Desde los primeros minutos, miles y miles de personas han trabajado incansablemente para socorrer a sus pares.
En nuestro caso, dentro de la red MEGAPRO, contamos con dos PAS socios que han sufrido fuertes daños en sus oficinas y hogares, motivo por el cual, desde hoy a primera hora, ya cuentan con una brigada de emergencia, compuesta por el resto de los socios, destinada a atender los siniestros de sus clientes, de modo que puedan concentrar sus esfuerzos en atender sus propias urgencias y necesidades.
En fin: el cambio climático parece que llegó para quedarse. PLANIFIQUEMOS y preparemos un accionar digno y eficiente para brindar las mejores SOLUCIONES ante futuros hechos de este tipo.
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Lic. Omar Molea
Productor asesor de seguros – Molea Brokers de Seguros
España 266 – Moreno – Buenos Aires – Tel. (0237) 405 0346 begin_of_the_skype_highlighting end_of_the_skype_highlighting
omar@molea.com.ar; www.molea.com.ar
Integrante de Grupo MEGAPRO – Red de Organizadores de Seguros