SETENTA Y CINCO AÑOS DE LA AACMS

En 2015, la Asociación Argentina de Cooperativas y Mutualidades de Seguros (AACMS) cumplió 75 años. Fue fundada el 1º de Noviembre de 1940.

En diálogo con El Seguro en Acción, su actual presidente, el Lic. Alfredo González Moledo, trazó una reseña de la historia de la institución y su aporte al desarrollo del seguro cooperativo.

El Seguro en Acción (ESA): ¿En qué contexto se creó la AACMS?

Alfredo González Moledo (AGM): El contexto fue el siguiente. A principios del siglo pasado, unos 40 colonos europeos (fundamentalmente dinamarqueses y franceses, y también alemanes), se radicaron en la zona que actualmente ocupa la ciudad de Pigüé. Eran productores agropecuarios.

En esa época, nadie les cubría el riesgo de Granizo que amenazaba sus cultivos. Encima, es una zona con alta incidencia de este fenómeno metereológico. A los pocos años, los colonos decidieron conformar una cooperativa de seguros agrícolas para cubrir el riesgo de granizo. Así crearon la “El Progreso Agrícola de Pigüé”, en 1898, que hoy, 110 años después, es la aseguradora “El Progreso Seguros”, entidad miembro de la AACMS. Y los colonos daneses de la zona crearon la Asociación Mutual Dan, en 1927. Estas entidades hicieron nacer la Asociación en 1940.

ESA: ¿Y cómo se llegó a la creación de la Asociación?

AGM: A medida que fueron apareciendo estas cooperativas sueltas, surgió la necesidad de que alguien las asesorara, las capacitara y las representara.

En ese contexto se decidió la creación de la Federación de Cooperativas de Seguros, que luego derivó en la creación de la AACMS.

Con el tiempo, varias cooperativas se transformaron en mutuales y por ello es que la Asociación también acoge en su seno a las mutuales.

Por cierto desconocimiento en el Estado respecto del cooperativismo en aquella época, la Federación vio la necesidad de crear una entidad civil sin fines de lucro, que es la Asociación de Cooperativas y Mutualidades, que cumple los dos roles, el de la Federación y el de la Asociación propiamente dicho.

ESA: ¿Cuántas entidades conformaron la Asociación a lo largo de su historia?

AGM: Hubo varias etapas. Llegamos a tener 29 cooperativas asociadas. Después muchas de ellas se fusionaron, otras se cerraron, y llegamos a un mínimo de siete empresas. Hoy 21 entidades conforman la AACMS (*).

Como en la historia de muchas instituciones, hubo un periodo de auge y un periodo de decrecimiento. También es cierto que hubo un período en que sufrimos una suerte de ‘publicidad sucia’ con respecto a que el cooperativismo era comunista. Se dijo que todos los cooperativistas eran comunistas, cuestión que es absolutamente absurda porque la mayoría eran ‘terratenientes’, personas que tenían algunas hectáreas, eran productores agropecuarios. A raíz de eso hubo una cierta caída de ‘prestigio’, generada por mala información. Pero luego se superó.

Otra situación destacable es que el estatuto de la Asociación tuvo modificaciones en distintas etapas (en las décadas del 70, 80, 90 y hace unos pocos años), para recibir a las mutuales, en primer término, y con posterioridad a eso se cambió el estatuto para admitir a las sociedades anónimas, porque varias cooperativas cambiaron su tipo jurídico y se convirtieron a sociedades anónimas.

Otro de los cambios estatutarios tuvo como objetivo permitir que algunas aseguradoras que eran Organismos del Estado, pudieran afiliarse a la Asociación.

ESA: Como se sabe, el reaseguro es fundamental para el seguro. ¿Cómo vivieron las aseguradoras afiliadas a la AACMS la última etapa del INdeR (Instituto Nacional de Reaseguros) y la disolución de este Organismo que monopolizaba el reaseguro?

AGM: La última etapa del INdeR, es decir de los años 80 en adelante, se caracterizó por ‘emparejar para abajo’. El mercado perdió profesionalismo. A nadie le importaba retener riesgo porque se lo transferían todo al INdeR. Las compañías se convirtieron prácticamente en agentes de colocación del Instituto, y nada más.

En esa época no hubo un crecimiento real de mercado. Hubo un aumento de caja, un crecimiento de la prima, pero todo el riesgo terminaba en el INdeR y este lo transfería en gran medida al exterior.

Cuando comenzó la disolución del INdeR, en 1992, se liberó el 60 % del reaseguro de automóviles, nada más, cuando la RC era ilimitada, hay que recordarlo.

A partir de este momento, comenzaron a generarse graves problemas. La Asociación, en forma inmediata, decidió hacer un pool, para cubrir ese riesgo para sus afiliadas que tuvieron que salir a buscar reaseguro al mercado internacional. Pero no siempre lo conseguían y los ‘precios’ eran muy elevados para muchas entidades de reducido tamaño.

De todos modos no fue un proceso fácil. La Asociación creó el Pool Nacional de Reaseguros que actualmente administra Stop Loss Bureau de Reaseguros S.A., entidad de la AACMS, pero al principio hubo mucha desconfianza respecto del resultado del pool. Tanto, que ingresaron solamente siete empresas.

ESA: ¿En ese momento la Asociación tenía mayor cantidad de afiliadas que las siete entidades que se adhirieron al pool?

AGM: Sí. En ese momento la Asociación tenía algo así como 20 aseguradoras afiliadas. Muchos no confiaban en que el pool pudiera perdurar, sobre todo cubriendo la RC ilimitada de automóviles.

El primer año hubo sólo siete contratos de reaseguro. Pero, poco a poco, la confianza creció. Hoy en día tenemos 100 contratos de reaseguros automáticos y unos 1.900 contratos facultativos anuales.

Hace unos años, cuando el pool empezó a quedar chico, la AACMS creó una reaseguradora local: Reaseguradores Argentinos S.A. (RASA).

El problema central fue que cuando el reaseguro quedó libre en todos los ramos, varias entidades afiliadas a la AACMS quedaron sin reaseguro, porque las condiciones del mercado internacional eran muy duras para ellas.

Además, el pool permitió sortear la crisis de 2002, cuando se cortaron los pagos al exterior, etc.

En una palabra, tanto el pool como Stop Loss, como RASA, fueron evolucionando con instituciones exclusivamente argentinas. No se tomó otro camino. No se salió a competir en el mercado con otros operadores, para nada. Se salió a dar prestación de servicio a aquellos que lo necesitaban.

Hoy, todas las entidades que están afiliadas a la Asociación de cooperativas forman parte del Pool Nacional de Reaseguros. Es más, muchas se afiliaron por eso. Porque algunas entidades eran muy pequeñas y ya nadie quería darles reaseguro o el costo era altísimo. Esas entidades se acercaron a la AACMS y aquí se les brindó reaseguro.

El pool es administrado por Stop Loss Bureau de Reaseguros Sociedad Anónima. Y Finaloss (creada en 2004), surgió para administrar los fondos del pool que en este momento ascienden a 700 millones de pesos.

En suma, el Pool Nacional de Reaseguros que administra Stop Loss, sería como ‘la primera napa’ de cobertura de reaseguros. El segundo tramo es la cobertura que brinda RASA.

ESA: La AACMS representa a las afiliadas ante los Organismos públicos y las otras Cámaras del sector. ¿Cuáles otras representaciones asume?

AGM: La AACMS también es miembro paritario representando a las entidades asociadas ente la Comisión Paritaria Permanente en el Ministerio de Trabajo y ante el Sindicato del Seguro, ante la Obra Social de Seguros (OSSEG); es miembro consultivo de la Superintendencia de Seguros de la Nación.

En una palabra, la Asociación tiene todas las representaciones técnicas de seguros en nombre de sus afiliadas, aparte de la representación en el INAC (Instituto Nacional de Acción Cooperativa), por los temas cooperativos.

ESA: ¿Por qué la AACMS rinde tributo al Dr. Arturo Vainstok?

AGM: Arturo Vainstok redactó el estatuto de la AACMS en 1940. Dedicó su vida al cooperativismo. Fue uno de los tratadistas internacionales del cooperativismo más importantes que existieron. Fue directivo de la Confederación Cooperativa de la República Argentina (COOPERAR), de la AACMS, del Instituto Argentino de Investigaciones de Economía Social y de la Cooperativa El Hogar Obrero, en su momento de mayor empuje.

También fue co-redactor de la Ley General de Cooperativas (Ley 20.337), e integró la Comisión Consultiva y Revisora de la Ley General de Seguros, que dio lugar a la Ley 17.418.

Era realmente un maestro, una persona de unos valores incalculables. Es por eso que para nosotros es un ícono y, sobre todo para gente como yo que tuvo la suerte de trabajar 30 años con él, invalorable.

ESA: ¿De qué manera la AACMS representa al seguro cooperativo argentino en el mundo?

AGM: La AACMS participa en la Federación Internacional de Cooperativas y Mutuales de Seguros (ICMIF), que es el Organismo mundial de cooperativismo de seguros. Ahí representa a toda América Latina, desde Puerto Rico para el sur.

Somos miembros del Comité Ejecutivo, del Comité del Desarrollo de Seguros y del Comité de Reaseguros.

A su vez, el ICMIF se subdividió y abrió una sede por continente.

Así, se conformó una Asociación europea, una americana, una africana y otra asiática. La americana es la Asociación de Cooperativas y Mutualidades de Seguros de las Américas, cuya titular es la Cdora. Rosana Laura Ibarrart, gerente general de otra de las entidades afiliadas a la AACMS, Seguros Rivadavia.

ESA: ¿Y de qué manera la AACMS fomenta el seguro cooperativo?

AGM: La Asociación pertenece a la Federación Internacional de Cooperativas y Mutualidad de Seguros, porque ésta está para asesorar y asistir a la creación de nuevas cooperativas en países donde no existan.

Y la AACMS hace lo propio con cooperativas de toda América. La AACMS ha dado más de 50 charlas sobre el cooperativismo y el seguro cooperativo en distintos países.

Bajo esa asistencia se crearon cooperativas en Chile, Perú, Bolivia, Costa Rica, Uruguay, Paraguay y Brasil.

Y en la Argentina, además de representar a las entidades, hemos realizado seminarios de capacitación, proveemos de reaseguro, asesoramiento financiero, asesoramiento técnico, y conferencias en el terreno.

ESA: ¿Cuáles son los hitos en la historia de la AACMS?

AGM: Después de su constitución, la solución a las enormes dificultades que tuvieron las afiliadas para obtener reaseguro después de la disolución del INdeR, es el más importante.

En ese momento, sin el INdeR, nadie abría una empresa de seguros. Pero la acción de la Asociación logró que ninguna aseguradora cerrara. Se apoyó a todas y así mantuvieron su cartera.

El segundo gran paso fue la administración propia de los fondos, con la creación de FINALOSS.

Ambos proyectos generaron disgusto a otros actores del mercado. ¿Por qué? Es fácil. Nosotros administramos nuestros propios fondos, por ello no recurrimos a los servicios de la banca para ello.

Y hemos diseñado un esquema de reaseguros que nos permite retener la mayor parte del riesgo, por lo que la transferencia a los reaseguradores es mínima.

Además, tanto STOPLOSS como FINALOSS no tienen fin de lucro, por lo tanto resulta una administración muy eficiente en costos para las aseguradoras.

Desde nuestro punto de vista, este esquema evitó que se transfirieran al exterior algo así como 1.500 millones de dólares.

A.C.