EL PAPA Y LAS NACIONES UNIDAS HACEN NUEVOS Y FUERTES LLAMADOS A CUIDAR EL MEDIO AMBIENTE

aaraBuenos Aires, 02 de junio de 2014

COMUNICACIÓN DE PRENSA

5 de Junio – Día Mundial del Medio Ambiente

Cada año el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA) convoca de manera ingeniosa y efectiva a crear conciencia mundial sobre la importancia de llevar adelante acciones conjuntas e impactantes a favor de la construcción de un mundo mejor, más sustentable, con menor contaminación, especialmente aquella creada por el propio hombre tanto sea como consecuencia no deseada de su acción productiva como de conductas desaprensivas.

Y casi como un refuerzo espiritual, el Papa Francisco hizo recientemente un nuevo llamado a «cuidar y tratar con respeto» al medio ambiente, advirtiendo sobre los “peligros” de disponer “sin límites” de la naturaleza: “Dios perdona siempre –dijo-; nosotros, los hombres, perdonamos algunas veces” pero “la naturaleza no perdona nunca si la maltratamos»

El Santo Padre señaló que «la creación no es propiedad nuestra, y, menos aún, sólo de algunos, sino que es un regalo que Dios nos ha dado para que la cuidemos y la utilicemos con respeto en beneficio de todos» y que «si no cuidamos la creación, la destruimos. Y si destruimos la creación, la creación nos destruirá a nosotros».

Este año el lema elegido para el Día Mundial del Medio Ambiente, que se celebra el 5 de junio, es «Alza tu voz, no el nivel del mar», como una expresión favorable a la urgente acción protectora a los Pequeños Estados Insulares en Desarrollo. La alegoría se refiere precisamente al nombramiento, en 2014, del Año Internacional de los Pequeños Estados Insulares en Desarrollo, por parte de la Organización de las Naciones Unidas (ONU).

Argentina, como miembro activo de las Naciones Unidas y por ende del PNUMA, se ha evidenciado a lo largo de los años como un país sensible por los daños que ocasiona la contaminación al desarrollo humano, lo cual se ha reflejado en la construcción de un valioso andamiaje jurídico y administrativo, que muchas veces no tiene el acompañamiento necesario de parte de la sociedad, especialmente cuando los intereses privados se colocan por sobre el interés común.

En el mencionado andamiaje legal y administrativo se ubica el Seguro Ambiental Obligatorio (SAO), efectivo desde hace seis años, un instrumento de gestión ambiental exigido por el Estado para alcanzar el bien común a través de la protección del ambiente, patrimonio de todos.

Estas normativas han introducido el concepto de responsabilidad ambiental y, en consecuencia, obligaciones asociadas al daño ambiental, principalmente para su prevención, recomposición y resarcimiento. A esos fines, con base en uno de los principios del derecho ambiental, el responsable debe internalizar, afrontar con su propio patrimonio los costos de dañar el ambiente. Asume así las que antes eran externalidades negativas que recaían con sus costos sobre el Estado, esto es, sobre toda la sociedad.

El recordatorio anual del Día Mundial del Ambiente es un llamado a la conciencia de todos los habitantes del planeta; una convocatoria a acciones gubernamentales, institucionales, empresariales, colectivas e individuales. El desafío es a la conciencia propia pero también a la de los funcionarios  y a la solidaridad de quienes hasta hoy han venido haciendo lo que no corresponde al beneficio común, bajo la suposición de que su acción individual es insignificante, cuando la suma de las acciones individuales desaprensivas es lo que conspira más negativamente contra el mejoramiento de las condiciones ambientales.  

 

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