Héctor Gueler: El mercado asegurador de personas se transforma y hay que adaptarse a nuevas realidades

sdsaddsadsaExposición del actuario Héctor Gueler

Buenos Aires, 3 de septiembre de 2014

En los últimos 50 años el mercado de seguro de las personas ha tenido “grandes cambios que también marcan una nueva tendencia en el servicio y las necesidades de una sociedad que valora este tipo de coberturas”, señaló hoy Héctor Gueler, de FM&A/Milliman.

El actuario explicó que “la evolución y transformación en el mercado de demanda de seguros personales, plantea nuevas oportunidades en el diseño y la distribución de productos”, al disertar en el Séptimo Seminario Internacional de Seguros de Vida y Retiro organizado por AVIRA.

Explicó que los “datos a los cuales accedemos nos permiten contar con las herramientas necesarias para formular las ofertas adecuadas”.

Inició su exposición con un análisis desde el punto de vista de la oferta y la demanda individual: “Tradicionalmente se comercializaba con la estrategia del ‘ciclo de vida’, que era bastante uniforme para todos los consumidores y en forma complementaria un ‘análisis de necesidades financieras’. Sin embargo esto ha cambiado notoriamente.”

En relación a esta aseveración, señaló que a modo de ejemplo “si bien la población de la Ciudad de Buenos Aires mantiene su nivel – ha sido constante en cerca de 3 millones de habitantes por los últimos 70 años -, se observa un incremento significativo en la cantidad de hogares, esto se explica por un cambio sensible en la estructura de los hogares y consecuentemente en las composiciones familiares”.

Se puede apreciar un crecimiento significativo en la denominada “vivienda unipersonal” que saltó en 30 años de 15,9% (1980) al 30,3% en 2010, en una tendencia que se hizo notar más entre los varones como jefes de hogar que en el mismo lapso de tiempo pasó del 7,7% al 20,5%.

En el caso de las mujeres como jefas de hogar –indicó- tuvieron dos crecimientos notorios: primero en la cantidad de viviendas con mujeres como jefas, que pasó en 1980 de 250.244 a 491.553 y en el rubro vivienda unipersonal que pasó de 37% al 44%.

A modo de cierre del enfoque individual del mercado, se analizó el incremento de la sobrevida a través del análisis de las vidas medias, entendiendo que las expectativas de vida de los consumidores son significativamente mayores.

En el enfoque corporativo teníamos una estructura rígida de beneficios asignados por escalas jerárquicas, pero modificaciones en la visión de empleados, empleadores y el entorno socioeconómico han modificado esta estructura hacia esquemas de beneficios flexibles en los que el empleado selecciona de un menú de beneficios que le propone el empleador, los que se mejor se adecuan a sus necesidades personales”, señaló

Gueler advirtió que “se han producido en estos últimos 50 años cambios interesantes en las variables desde el punto de vista del empleador, del empleado y el ambiente socio-económico”.

Sostuvo que “el empleador tiene en este presente una necesidad de mejorar su gerenciamiento de beneficios y a la vez trasladar más responsabilidades a sus empleados, entendiendo la necesidad de complementar la seguridad social”.

Pero aclaró que “la mirada del empleado pasa por otros tópicos, aunque tiene puntos de encuentro con su empleador, asume la responsabilidad transferida y analiza y selecciona de acuerdo con sus necesidades, consciente de los cambios en las estructuras familiares”.

Observa la “evolución de su enfoque de la movilidad laboral”, desapareciendo la idea del “empleo vitalicio”.

En cuanto el ambiente socio-económico, el especialista dijo que “las variaciones más significativas son los cambios en la Seguridad Social como ser incrementos de aportes o edades de retiro, la integración cultural y generacional, y la movilidad de los talentos”.

De esta manera, a modo de conclusión indicó que las variaciones en la demanda a nivel individual consideran, un ciclo de vida dinámico, un incremento de la supervivencia y un aumento del individualismo.

Mientras que a nivel corporativo se evidencian las transferencias de responsabilidad, mayor integración y estructuras más flexibles.

Las oportunidades surgirán de entender las nuevas necesidades y estructuras de la demanda.

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