Russell Bedford Argentina realizó un estudio sobre el mercado de seguros para conocer el impacto que está teniendo la “cuarentena” decretada por el Gobierno Nacional en la economía, y particularmente en la industria aseguradora. Una visión global de la situación actual.
En primer lugar, los resultados muestran que las aseguradoras están muy preocupadas por la fuerte disminución en la cobranza de primas. En este sentido, el 32.5% de las compañías manifestó que se redujo entre el 20% y 30%, mientras que un 20% aseguró que las cobranzas se redujeron entre un 10 y 20%, y otro 20% en menos del 10%. Por último, se ubicaron las que manifestaron una disminución entre el 40 y 50% (10% de las respuestas) y más del 50% (5% de las respuestas).
Al momento de plantear las 3 principales dificultades operativas que las aseguradoras están teniendo debido a la “cuarentena”, las opciones más mencionadas fueron: dificultades comerciales (60%), vinculadas a la atención al cliente (35%) y referidas a la inspección (30%). Otra problemática mencionada fue la cobranza, debido a que muchos asegurados optan por medios presenciales de pago los cuales estuvieron afectados por su cierre durante un tramo del aislamiento social preventivo y obligatorio.
Asimismo, varias aseguradoras no estaban preparadas para funcionar 100% con teletrabajo, con lo cual precisan que se flexibilice una pequeña porción de su dotación para que puedan operar de manera eficiente. En este sentido, al consultarles por el porcentaje de la nómina que necesitan que el gobierno habilite para que puedan trabajar en sus oficinas a pesar de la cuarentena, las respuestas fueron: el 20% manifestó que no necesita habilitación alguna; el 17.5% necesita entre el 5 y 10% de su dotación; el 15%, entre el 10 y 20%; otro 15%, más del 30%; y un 12.5%, entre el 20 y 30%.
Por último, al indagar en las principales medidas que las aseguradoras reclaman a la Superintendencia de Seguros de la Nación (SSN) para facilitar o minimizar el daño a la industria en este momento, las más mencionadas fueron:
- Realizar gestiones para lograr flexibilizar aunque sea parcialmente la cuarentena para el sector seguros.
- Que se les permita valuar los activos a valor técnico en los próximos cierres de balance.
- Que se les brinde la posibilidad de pagar impuestos utilizando bonos valuados a valor técnico.
- Pagar el impuesto al valor agregado calculándolo sobre las primas percibidas y no sobre lo emitido.
- Acuerdo con la Justicia para el pago de demandas judiciales con plazo de 1 año de gracia o en cuotas.
- Trabajar para eliminar la disparidad de criterios judiciales con respecto a la aplicación de intereses en las sentencias.
“Tal como se vino mostrando, los resultados evidencian que las aseguradoras están muy preocupadas por la fuerte disminución en la cobranza de primas. La disminución de la siniestralidad es sólo un remedio parcial y momentáneo, y se percibirá recién en unos meses y por un corto período” aseguró Daniel Ryba, partner de Russell Bedford Argentina. Y siguió: “Mientras tanto, las compañías siguen teniendo que enfrentar pagos que no disminuyen como los vencimientos impositivos, el pago de salarios y el de los siniestros pasados. Los activos que fueron devaluados por la crisis local agravada por el coronavirus suman una importante complicación adicional”.
Muestra: 40 aseguradoras (las aseguradoras pertenecientes a grupos económicos de más de una aseguradora están consideradas como una sola entidad). Representatividad de las respuestas: 72,4% de participación de mercado. Fecha del estudio: última semana de abril.
