
Tras la Revolución de Mayo de 1810 surgió la necesidad de poseer símbolos propios que representaran la existencia de “una nueva y gloriosa Nación”. Una bandera, un escudo, una escarapela y un himno que fueran reconocidos en todo el mundo como pertenecientes a las Provincias Unidas del Río de la Plata.
En 1812, el Triunvirato pidió una marcha patriótica y, unos meses después, en 1813, se reunió una Asamblea Soberana que encargó la creación de esa canción.
El 11 de mayo de 1813, la Asamblea del Año XIII aprobó utilizar como Himno Nacional la canción patriótica compuesta con versos de Vicente López y Planes y su música compuesta por Blas Parera. El 14 de Mayo se hicieron pequeños ajustes al texto, que incluimos al pie de esta nota.
Fue cantado por primera vez en la casa de Mariquita Sánchez de Thompson (María Josepha Petrona de Todos los Santos Sánchez de Velasco y Trillo), que cantó las primeras estrofas del Himno.
Lo que pocos saben:
En 1860 la música del Himno Nacional fue mejorada por Juan Pedro Esnaola, quien enriqueció la orquestación y la armonía. En el año 1900, un decreto del presidente Julio Argentino Roca dispuso que sólo se cantaran la primera y la última cuarteta y el coro de la Canción Nacional.
La versión original tiene un coro y nueve estrofas, cada una formada por dos cuartetas decasílabas.
Con las correcciones del 14 de mayo de 1813, el siguiente es el texto original (Aclaraciones de Wikipedia):
Himno Nacional Argentino
(Letra completa y corregida)
Letra: Alejandro Vicente López y Planes
Música: Blas Parera
¡Oíd, mortales!, el grito sagrado:
¡libertad!, ¡libertad!, ¡libertad!
Oíd el ruido de rotas cadenas
ved en trono a la noble igualdad.
Se levanta en la faz de la tierra
una nueva gloriosa nación.
Coronada su sien de laureles,
y a sus plantas rendido un león. (bis)
Estribillo (con coro)
Sean eternos los laureles
que supimos conseguir: (bis)
coronados de gloria vivamos,
o juremos con gloria morir. (tris)
De los nuevos campeones los rostros
Marte mismo parece animar. (bis)
La grandeza se anida en sus pechos
a su marcha todo hacen temblar.
Se conmueven del Inca las tumbas,
y en sus huesos revive el ardor,
Lo que vé renovando a sus hijos
de la Patria el antiguo esplendor. (bis)
Estribillo (con coro)
Pero sierras y muros se sienten
retumbar con horrible fragor. (bis)
Todo el país se conturba por gritos
de venganza, de guerra, y furor.
En los fieros tiranos la Envidia
escupió su pestífera hiel. (bis)
Su estandarte sangriento levantan
provocando a la lid más cruel. (bis)
Estribillo (con coro)
¿No los veis sobre México y Quito
arrojarse con saña tenaz? (bis)
¿Y cuál lloran, bañados en sangre
Potosí, Cochabamba, y La Paz?
¿No los veis sobre el triste Caracas
luto, y llanto, y muerte esparcir?
¿No los veis devorando cual fieras
todo pueblo que logran rendir? (bis)
Estribillo (con coro)
A vosotros se atreve argentinos
el orgullo del vil invasor.
Vuestros campos ya pisa contando
tantas glorias hollar vencedor. (bis)
Mas los bravos que unidos juraron
su feliz libertad sostener
a estos tigres sedientos de sangre
fuertes pechos sabrán oponer.
Estribillo (con coro)
El valiente argentino a las armas
corre ardiendo con brío y valor:
El clarín de la guerra, cual trueno
en los campos del Sud resonó.
Buenos Aires se pone a la frente
de los pueblos de la ínclita unión.
Y con brazos robustos desgarran
al ibérico altivo león.
Estribillo (con coro)
San José, San Lorenzo, Suipacha,
ambas Piedras, Salta, y Tucumán,
la colonia y las mismas murallas 11
del tirano en la banda Oriental. (bis)
Son letreros eternos que dicen:
aquí el brazo argentino triunfó;
aquí el fiero opresor de la Patria
su cerviz orgullosa dobló. (bis)
Estribillo (con coro)
La Victoria al guerrero argentino
con sus alas brillantes cubrió.
Y azorado a su vista el tirano
con infamia a la fuga se dio. (bis)
Sus banderas, sus armas, se rinden
por trofeos a la libertad.
Y sobre alas de gloria alza el pueblo
trono digno a su gran majestad. 12
Estribillo (con coro)
Desde un polo hasta el otro resuena
de la fama el sonoro clarín. (bis)
Y de América el nombre enseñando
Les repite, mortales, oid:
Ya su trono dignísimo abrieron 12
las Provincias Unidas del Sud.
Y los libres del mundo responden
al gran pueblo argentino salud. (bis)
Estribillo (con coro)
El himno tuvo cambios para adecuarse a la época y bajar los decibeles de su carácter revolucionario. A partir de 1900 el Presidente Julio Argentino Roca decreta el texto válido hasta la actualidad:
Letra
Alejandro Vicente López y Planes
Música
Blas Parera
Arreglos
Juan Pedro Esnaola
¡Oíd, mortales!, el grito sagrado:
¡libertad!, ¡libertad!, ¡libertad!
Oíd el ruido de rotas cadenas;
ved en trono a la noble igualdad.
¡Ya su trono dignísimo abrieron
las Provincias Unidas del Sud!
Y los libres del mundo responden:
¡al gran pueblo argentino, salud! (bis)
Y los libres del mundo responden:
¡al gran pueblo argentino, salud!
Y los libres del mundo responden:
¡al gran pueblo argentino, salud!
Coro
Sean eternos los laureles
que supimos conseguir: (bis)
Coronados de gloria vivamos,
¡o juremos con gloria morir! (tris).
Escuchemos uno de los himnos más hermosos del mundo: